En
ocasiones ni siquiera aquí me siento segura para expresar lo que pienso e
inclusive lo que me duele y molesta.
Me
siento como si todo lo que hiciera no valiese la pena, como si todo lo que he
vivido de nada hubiese servido.
La
verdad es que trato de ser muy fuerte y para que en mí no exista una mirada de
tristeza, tengo que cambiarla por otra en la cual parece que tengo veinte
demonios dentro. No pretendo ser alguien que no soy.
-“Has cambiado
+Oye si, antes era más estúpida”
Tengo
que decirlo, tengo que confesarlo, la verdad es que ya no soporto más esto, si
he cambiado carajo, he cambiado, no sé si para bien o para mal, pero lo he
hecho. Si soy una estúpida inmadura que importa, no eres quien para echármelo en
cara porque tú no te quedas atrás. Siempre he callado ciertas cosas solo para
no ser hiriente, pero que recibo a cambio, solo lagrima tras lágrima, puñalada tras
puñalada.
Existe
una persona que en ocasiones lejos de hacerme sentir mejor me hace sentir ganas
de morir y es sorprendente como ciertas palabras pueden herir tanto. Admito que
quisiera estar frente a él, arrodillarme y rogarle que me mate, porque sinceramente
eso dolería menos.
Me
he esforzado demasiado para ser quien soy, para perdonar aquellos que me han dañado,
para lograr ciertas cosas, para dejar la estupidez del suicido atrás; me he
esforzado en apreciar más las cosas, pero sobre todo en ser fuerte a pesar de
todo. Pero ¿de qué ha servido vale? todo
lo que me esfuerzo se va al carajo en un abrir y cerrar de ojos.
Hay
momentos en los que detesto ser quien soy, no tener esa tranquilidad e
inocencia de antes. Quizá soy un monstruo, es en lo que me he convertido, pero
francamente ¿cómo esperan que sea? Si a punta de palos la vida me ha mostrado
una cara, la cual no ha sido muy grata para mí. Pero claro es tan fácil decir
que ni aun así he madurado, ¿realmente me conoces como para decir tal cosa?
Es
que no pueden ver que sus palabras son como balas, atraviesan mi corazón hasta
llegarme al alma y luego ¿cómo se supone
que he de sentirme?
Hay
personas a las cuales les estoy muy agradecida por sus palabras, me hacen
sentir bien, importante, como si fuera una persona de valor. Claro, también están
quienes por el contrario me hacen sentir la peor basura del universo, gracias!!
Parezco
tan dura, tan difícil, pero en el fondo soy una persona sensible y fácil de convencer,
pero si yo no me protejo a mí misma, nadie más lo hará. Si me muestro como
realmente soy, sé que me van a destruir por completo, más de lo que ya.
Si
maduro o no, si mi mirada causa miedo o no, eso no importa, lo que importa es
quien sea la persona con la que trate; puedo ser buena o no, todo depende de
que tan linda y sincera sea conmigo la persona que tenga de frente.
No
negare que escribir todo esto me ha hecho llorar, puesto que ciertas palabras
me han hecho recordar momentos que vaya, han sido duros.
Quisiera saber que todo ha valido la pena y que no importa
que no sea una persona perfecta, tendré una gran recompensa.
Necesito un milagro, solo eso.